“Nunca convencerás del todo a alguien de que está equivocado; solo la realidad podrá convencerlo. Pero a la realidad no le importan los argumentos ganadores: lo que le importa es la supervivencia… Pues, la maldición de la modernidad es que cada vez estamos más colonizados por una clase de personas cuya capacidad para explicar las cosas supera su capacidad de comprensión” (texto del libro “Jugarse la piel” Nassim N Taleb )
En estos días que corren y a veces nos recorren, la lectura de los aportes de Nassim N Taleb (1960 – Líbano) me parece más que oportuna, su modelo mental casi transgresor aporta la necesaria incomodidad para formular nuevas y necesarias preguntas que quizás nos generen nuevas respuestas, para la etapa larga que llevamos de pospandemia.
Uno de los aspectos, entre tantos otros que seguramente sea necesario revisar en un debate amplio, abierto y sin dogmas inhibitorios, es el referido a los sistemas previsionales para que logren ser sustentables y sostenibles en el tiempo, habida cuenta del acelerado factor de longevidad creciente y su opuesto de natalidad decreciente. Hoy ya se percibe un nuevo y necesario contexto por atender que se define como «economía plateada», es un cada vez mayor segmento social, mayores de 60 años que requieren productos y servicios focalizados en sus expectativas, aspiraciones y necesidades concretas y específicas.
Mientras tanto, la cada vez más urgente alfabetización financiera nos impone poner sobre análisis al ahorro voluntario e individual como verdadera herramienta social, colaborativa y complementaria de todo sistema previsional, para el presente y el futuro inmediato y mediato.
En tal sentido, uno de los aportes de análisis más interesantes desde hace ya algunos años, lo trae el economista conductual, de familia china, Keith Chen (doctorado en Economía Harvard). Su mirada muy novedosa refiere al impacto de la estructura del idioma y el lenguaje en nuestra propensión respecto al ahorro.
En aquellas lenguas donde existe una brecha notoria entre momento y acontecimiento, expresando con suma nitidez al futuro, separado del presente, es menor la propensión al ahorro. Al contrario y tomando un ejemplo del mismo K. Chen , en chino mandarín se expresa: “ayer llueve; hoy llueve; mañana llueve”, en este tipo de lenguaje el ahorro está incorporado. En nuestro lenguaje la referencia a la lluvia ya sabemos refiere a cada momento bien taxativo como pasado, presente y futuro, esto es: ayer llovió, hoy llueve, mañana lloverá.
Con el análisis así expresado por K Chein y tomando la totalidad de países miembros de la OCDE (organización para la cooperación y el desarrollo económico) argumenta que de acuerdo a la característica particular de lenguaje, hay países con mucha más capacidad de ahorro que otros, precisamente aquellos sin brecha entre presente y mañana.
Culturalmente los países de Latam suelen tener dificultad para asumir el hábito del ahorro. Desde niños nadie nos educó respecto a gastos y consumos, pero para ahorrar sí necesitamos entenderlo, disponer de un acto de voluntad, darle prioridad y disponer de paciencia para que el ahorro por goteo, sobre un flujo de ingresos pueda crecer y construir un stock de capital.
Evidentemente no podemos pensar y expresar, como lo hacen los chinos, en términos: “ayer ahorro, hoy ahorro, mañana ahorro”, y justamente al pensar en la jubilación, en general para los jóvenes generación Z y millennials es en referencia de una etapa que llegará, pero para ello falta mucho aún y no es urgente hoy entonces ocuparnos.
También lo podemos expresar de esta manera, como brecha generacional:
A los 25 años, cuando podemos, no queremos –
A los 50 años, cuando queremos, no podemos –
Desde nuestra juventud, iniciando los primeros empleos, ahorrando poco capital cada mes, pero con muchos años por delante, el factor capitalización de la tasa de interés compuesta, genera muchas posibilidades de acumular stock de capital. Ya en nuestra etapa madura, el factor tiempo obviamente menor, requiere fuertes aportes de sumas mensuales. Es menester conectarnos emocionalmente con el ahorro (cerebro límbico) ya que sólo por análisis racional (cerebro neocórtex) no alcanza para generar el necesario hábito desde nuestra temprana juventud.
La enorme expansión de ecosistema digital, es una oportunidad para el acceso al ahorro de millones de jóvenes y adultos, sea que puedan trabajar en la formalidad o informalidad. Los instrumentos tales como Fintech, Insurtech, Banca 100% digital, pueden canalizar ahorro en escala, más allá de los montos y periodicidad de los mismos. La utilización de smartphone genera accesibilidad y posibilidades concretas de administrar frecuencia e intensidad de aportes, siempre con el necesario resguardo respecto las condiciones de ciber seguridad.
Quizás sea necesario cuando hablamos de alfabetización financiera enseñar que tener un proyecto personal, un objetivo claro por cumplir, es muy necesario para motivar un ahorro personal. Dicho proyecto personal es un verdadero puente entre presente y futuro.Es más sencillo un objetivo a 5 años, con posibilidades de renovación cada 5, que uno a 25 años.
Los fondos de pensiones están llamados a un rol cada vez más relevantes, aportando a la educación en finanzas personales y como instrumentos de canalización del ahorro de mediano y largo plazo para todos los jóvenes que, apenas pueden, deben querer desarrollar su cuenta de ahorro.
Seguramente el gran aporte del economista Keith Chen, no sólo es advertir y describir una relación como la expuesta entre lenguaje y ahorro, también es un significativo disparador para innovar respecto a la alfabetización financiera, para no quedar “atrapados” en un lenguaje que como el inglés y el español son definidos por K Chen como lengua con futuro fuerte, que percibe el mañana como muy lejano del presente.
En la actualidad hay cada vez mayor cantidad de pensionados que aportaron 30 años y perciben haberes previsionales casi por la misma o más cantidad de años… sistemas ya con mucha dificultad técnica para ser sostenibles y sustentables.
Inicié mi columna con Nassim N Taleb y así la cierro: “hasta qué punto crees sinceramente en algo cuya verdadera entidad solo se pondrá de manifiesto en lo que estás dispuesto a arriesgar para obtenerlo”.
Adjunto video del canal YouTube de charla TED Talks del economista Keith Chan, haciendo referencia a la cuestión del lenguaje:
Podremos ayudar a las jóvenes generaciones a “arriesgar” hoy para creer que pueden hacerse cargo y responsables de una lejana etapa de retiro, a través del hábito del ahorro metódico y regular..?? Es urgente comprometernos y hacerlo a nivel global.
El desarrollo del presente borrador urbano tiene como base el contexto y contenido de mi columna de opinión publicada en el portal Funds Society en 2020.
Muchas gracias por disponer generosamente tu tiempo de lectura.
Abrazo. ers/2022